El pequeño Niko ha recorrido un largo camino. Nació en 2021 como un pequeño boceto «monstruoso» que hice mientras observaba a mi hija de tres meses. Más tarde, le siguieron nuevos dibujos. Pero solo tres años después, Niko —entonces todavía un pequeño monstruo sin nombre— finalmente se convirtió en el héroe de una historia. La historia creció, cambió, se editó y casi terminó escondida en un cajón. Pero en 2025, gracias a Apila Ediciones y al Premio de Primera Impresión de Apila, el pequeño monstruo recibió un nombre, y ese nombre ahora está escrito en la portada del libro. Y como dirían los propios monstruos, ¡es maravillosamente mágico y de una locura magnífica!